Evidentemente no hay mucho diálogo en el gobierno de la Ciudad o al menos eso es lo que demuestran cuando Horacio Rodríguez Larreta anuncia el regreso pleno de las clases presenciales y la apertura de actividades en interiores con mayor aforo mientras el ministro de Salud se muestra realmente preocupado por la variante Delta y sus consecuencias.

El hecho es que ya detectaron al menos 35 personas en la Ciudad con esta peligrosa variante que es más contagiosa aunque parece ser un poco menso nociva.

La buena noticia es que ya hay casi un 55% de la población vacunada al menos con una dosis lo que hace que el contagio pueda ser menos letal y hasta evitar la internación.

Pero lo extraño es que Larreta no escuche a su ministro de Salud o, lo que sería aún peor, no le de importancia a la inminente llegada de la circulación comunitaria de la variante Delta.