El Airbus A320 de Germanwings desapareció de los radares en la región de Alpes de Alta Provenza, en el sur de Francia.

De acuerdo a las primeras informaciones, al partir de Barcelona, a las 9.55 (hora local), el vuelo GWI18G llevaba 144 pasajeros a bordo- dos de ellos bebés- y seis tripulantes (dos pilotos y cuatro ayudantes de cabina).

El presidente francés, François Hollande, ya habló de "tragedia" al asegurar que no hay "ningún sobreviviente". "Quiero expresar a las familias de las víctimas toda mi solidaridad", añadió el mandatario. "Ninguna hipótesis puede ser descartada", confesó el primer ministro galo, Manuel Valls mientras se encuentran en plena investigación sobre las causas del accidente.

Dos helicópteros de la gendarmería francesa fueron los encargados de confirmar a la Dirección General de la Aviación Civil (DGAC) de ese país que se localizó el aparato Airbus A320 cerca de Prads-Haute-Bléone, entre Digne-les-Bains y Barcelonnette, una zona de difícil acceso.

Germanwing es una compañía de bajo costo (o 'low cost') propiedad de la aerolínea alemana Lufthansa, y empezó a operar en Europa en 2002.

El comandante del vuelo llevaba diez años trabajando para Lufthansa y tenía más de 6.000 horas de vuelo, y las condiciones meteorológicas "no eran especialmente malas" en el momento del accidente.

Son más de 600 efectivos los que están trabajando en el área para "salvar todo lo que pueda salvarse" aunque deben luchar contra temperaturas bajo cero.

Una de las cajas negras del avión fue localizada y ya está siendo analizada por los expertos del organismo francés de Investigación de Accidentes (BEA).

Tanto Mariano Rajoy como Ángela Merkel señalaron que viajaran a la zona del desastre en la que fallecieron ciudadanos de ambos países