La pesadilla no terminó y Boca aún no llega a Buenos Aires tras la gira por el caribe que le dejó un millón de dólares de ganancia, un par de partidos olvidables, un plantel varado por 33 horas con quejas de corte gremial incluidas por el mal estado de la comida, cortocircuitos con la dirigencia, pérdida de peso en A.F.A. para postergar el día del debut en el torneo con Quilmes, una escala en Bolivia, un paseo por Villa Carlos Paz por no poder aterrizar en Ezeiza, y en las últimas horas una multa de la policía de Puerto La Cruz por hacer un asado con sillas del hotel, entre otras cuestiones.

En medio de esta verdadera odisea, salió a hablar el presidente del club Daniel Angelici. "La dirigencia de Boca revisará lo que dejó esta gira", dijo, pero ningún jugador lo escuchó porque aún llegaron desde Córdoba hacia Buenos Aires.

Pero vayamos al debate que nos interesa porque el plantel xeneize hizo efectiva aquella idea gorila de que los cabecitas negras "levantan el parquet del piso para hacer asado". Es que los jugadores de Boca decidieron hacer un asado cuando se enteraron de que por fin regresaban al país y como no encontraron maderas, prendieron el fuego con sillas del hotel.

¿Son peronistas por ello? Y más: ¿fue de clase, el reclamo vía tuiter del Flaco Schiavi por la comida que le dieron a "los compañeros"? ¿Y qué del cumplimiento de horario efectivo fuera de pretemporada? Angelici advirtió al defensor, en declaraciones a la prensa porteña: "No nos ayuda a nosotros como institución que haya mostrado su descontento en un Twitter. Cuando regrese el plantel voy a hablar con él".

¿Habrá reto para el gran capitán, máximo referente en el cuerpo de delegados tras el "cese" de Riquelme? ¿Presentará el plantel de Boca un reclamo en Futbolistas Argentinos Agremiados por la extensión de horas de trabajo de un máximo de 8 horas a estas 33?

Son todas preguntas que no harán los periodistas de los medios que hacen guardia en el aeropuerto. Es lo que sospechamos, por ahora la única certeza es que tras el desvío a Córdoba por nieblas en Ezeiza, los planteles de Boca y All Boys aún no regresaron. Claro que la estela de humo que deja un vuelo xeneize, no es igual a las chispas que harán las ruedas del mismo avión que traerá por fin a los de Floresta.