"Flakka es la marca de una de varias drogas estimulantes sintéticas, vendidas como estimulantes alucinógenos", relató  James Hall, epidemiólogo en el Centro de Investigación Aplicada sobre Uso de Sustancias y Disparidades de Salud, de la Universidad Nova Southeastern, en Davie, Florida  a BBC Mundo.

Hechos recientes generaron la alerta cuando un hombre corrió desnudo por la calle a plena luz del día, otro escapó de asesinos "imaginarios" y quedó atrapado en una reja. Seguido de otro caballero que optó por luchar contra una puerta de vidrio en una estación de policía mientras era "atacado por un huracán".

Todos los individuos admitieron haber consumido esta droga llamada "Flakka". "Es parecida a lo que se ha conocido como 'sales de baño' (bath salts, en inglés), drogas químicas sintéticas conocidas como catinonas", explica Hall.

Flakka es consumida de forma inhalada, ingerida, fumada o inyectada. Algunas personas incluso  la combinan con drogas recreativas como la marihuana.

Según cifras de la Agencia Antidrogas de EE.UU. (DEA por sus siglas en inglés), en 2013 en Florida 132 personas murieron en casos relacionados al consumo de flakka.

"El cuerpo entra en estado de hipertermia, alcanzando temperaturas extremas de más de 40°C y provocando delirios", revela Hall. Y agrega: "Es una droga de dosis muy específicas, y muchas veces los consumidores no saben qué están consumiendo ni cuánto y, en la mayoría de los casos, el vendedor tampoco lo sabe. Es muy peligroso. Algunas veces venden flakka como si fueran MDMA".

"Los medios no han reportado que esta droga se encuentra a lo largo del territorio estadounidense. En EE.UU. hemos visto que se vende la misma droga bajo el nombre de Gravel o de Molly en estados distintos a Florida", destaca el especialista.