Son poderosos, son ricos y toman las decisiones. Pero sus fondos no los tienen en el país, sino en el extranjero. Como si ya supieran cómo va a terminar la cosa. 

De la cuantiosa suma de activos que tienen todos los ministros del Gabinete de Mauricio Macri, el 43% de los activos declarados (es decir, lo que decidieron informar) está en el exterior. Así lo confirmó una nota del diario La Nación esta mañana. 

Pero eso no es todo, de todas sus inversiones en patrimonio, porque como buenos CEOS, el dinero les alcanza y sobra para llegar a fin de mes y hacer inversiones, el 80% está en el extranjero.

Por ejemplo, el jefe de los espías, Gustavo Arribas, declaró 108 millones de pesos fuera de la Argentina; el ministro de Energía, Juan José Aranguren, informó 88 millones, y el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, declaró 85 millones en el exterior.

Pero además, esta es una tendencia al alza, quizás la única que crece en este período: el dinero en el exterior de los funcionarios es un 50% más que el año pasado.

En números fríos, de las 70 declaraciones juradas se extrae que 365 millones de pesos son los que están fuera del país. De los activos en el exterior, un 60%, es decir 218 millones, está depositado en bancos extranjeros. Las sociedades, los bienes más difíciles de descifrar, se llevan el 20% ($ 72 millones) y otro 10% son inversiones inmobiliarias en Brasil y Uruguay.

El titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), el funcionario más rico del gabinete, con $ 126 millones, guarda el 86% de su patrimonio fuera del país. El ministro de Energía tiene l 84% de su patrimonio ($ 88 millones) depositado en un banco extranjero.

Dujovne, la figura más visible del equipo económico, tiene el 88% de sus bienes fuera de la Argentina, unos $ 74 millones: el principal activo son tres depósitos en cuentas bancarias que superan los $ 54 millones. Federico Sturzeneger, el hombre que regula la política monetaria, tiene el 70% de su patrimonio ($ 20 millones) en otros países. La mayoría son bonos de empresas argentinas que cotizan en el exterior, como YPF, Pan American Energy, IRSA y Banco Macro, que suman $ 10,5 millones. También tiene bonos estadounidenses y depósitos en bancos extranjeros.