"Regalo un niño sirio de la policía federal en Passau" es lo que puede leerse en la cuenta de Twitter de las autoridades alemanas.

En el dibujo se ve la guerra y terror de un lado (en Siria)  y un "bienestar" (Alemania) del otro en el que la policía parece cumplir un rol central.

Si bien muchos celebraron el gesto del pequeño, del que se reservó su identidad, otros plantean que se trata de pura propaganda alemana.

Merkel viene afrontando, con desaciertos, el candente tema de los refugiados que terminó de dispararse mediática y socialmente con la muerte del pequeño Aylan Kurdi en la playa.