A primera hora de este martes, el gobierno de Israel había anunciado que aceptaba la tregua en su sistemático bombardeo sobre Gaza, propuesta que había sido formulada por Egipto. Sin embargo, Hamás se negaba a tomar la misma decisión y sostenía que “la batalla contra el enemigo se intensificará".

En efecto, hizo falta el grupo palestino realizara nuevos disparos contra objetivos israelíes para que la fuerza aérea de este país reanudara el lanzamiento de misiles sobre la Franja.

"Después de los ataques unilaterales por Hamás, el ejército ha reanudado la actividad operativa en la Franja de Gaza", dice un escueto comunicado de esa fuerza, en el que agrega que "desde las 9.00 (hora local) unos 50 cohetes han sido disparados contra Israel".

No obstante, la agencia EFE corroboró apenas cinco lanzamientos de milicianos palestinos desde Gaza: dos en la localidad meridional de Jan Yunes, otro en el barrio de Zaitum, en Gaza capital, un cuarto en el oeste de esa ciudad y el quinto en el campo de refugiados de Al Bureij, también en la capital gazatí.

Como respuesta, el gobierno de Benjamín Netanyahu ordenó a su fuerza aérea una nueva oleada de misiles en el marco de un ataque que lleva ocho días y ya ha producido centenares de muertos, miles de heridos y pérdidas materiales incalculables.

"Después de que Hamás y la Yihad Islámica rechazaran la propuesta egipcia de cesar el fuego, y disparasen decenas de cohetes contra Israel, el primer ministro y el ministro de Defensa ordenaron al Ejército actuar con dureza contra blancos terroristas en Gaza", explicaron fuentes gubernamentales israelíes.