Emma Place, una maestra británica, se salvó por poco de ser envenenada por dos de sus alumnos de 10 años. En una broma muy peligrosa, los chicos le pusieron cloro al café.

La mujer se salvó gracias al aviso de otra de las estudiantes. El llamativo caso despertó la alarma en el sistema educativo de Leamington y es uno de los temas más comentados en Inglaterra.

El hecho sucedió en el colegio primario Clapham Terrace Community de la localidad de Leamington Spa, centro de Gran Bretaña. Los chicos fueron suspendidos hasta que se esclarezcan los hechos, mientras que la policía prefirió no intervenir en el caso.

Los dos pequeños, que según dijeron sus compañeros a la prensa británica pertenecían a una pandilla de chicos llamada "La Mafia", lanzaron cloro sobre el café que guardaba su maestra, Emma Place, en su taza térmica mientras ella estaba de espaldas.

Cuando la maestra de 39 años quiso darle un sorbo, una de sus alumnas le avisó sobre la "broma" de sus compañeros y ella dejó inmediatamente la bebida, de la que salía un "abrumador olor tóxico", según dijo después.

"No creo que los alumnos se dieran cuenta de la seriedad o gravedad de la situación", comentó un vocero de la fuerza local.

Según los medios locales, "La Mafia" hizo una lista de seis docentes para hacerles una broma pesada.