Jenna y Jillian son gemelas idénticas, que significa que los fetos comparten una bolsa amniótica y se mantienen en contacto casi constante durante la duración del embarazo, y  nacieron en Ohaio, Estados Unidos.

La historia se tornó conmovedora por las dificultas que tuvo la madre para dar a luz, pero más increíble fue la forma en que llegaron al mundo: las bebas nacieron tomadas de la mano.

"Es una experiencia muy difícil de atravesar", dijo la madre de las niñas que nacieron sanas a las 33 semanas a través de una cesárea, en relación a la condición de las bebas por ser gemelas idénticas.

En el momento del parto, los médicos maniobraron y mantuvieron a las nenas agarradas de manera tal, que la madre y su marido pudieran ver que sus recién nacidas estaban tomados de la mano.

"No pensé que iban a salir y al instante de la mano”, dijo la mujer a ABC News, y agregó: "No había un ojo seco en toda la sala de operaciones".