Jean Wyllys, el activista y ex diputado que abandonó Brasil con la llegada de Jair Bolsonaro al poder -acusando amenazas de muerte- dejó en ridículo a la embajadora brasileña ante la ONU Maria Nazareth Farani Azevedo, quien lejos de mantener un debate civilizado irrumpió cuando Wyllys desarrollaba sus conceptos.

Sucedió durante una sesión en Ginebra organizada por el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) de nuestro país, donde en varios encuentros se tocaron temáticas sobre los nuevos autoritarismos en el mundo: "Son los viejos autoritarismos ahora articulados con las características propias de la contemporaneidad. En el caso de Brasil, siguen eligiendo enemigos internos de la nación por medio de la difamación y constituyendo grupos para culparlos por los problemas económicos", afirmó.

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"La diferencia es que ahora están articulados con las nuevas tecnologías de la información. Articulan con organizaciones criminales que se infiltra en el estado, y tiene un fondo religioso y moralista mucho más acentuado ", advirtió el ex diputado, detallando además el crucial uso de fake news y el discurso del odio en las redes sociales.

Wyllys se ubicó como la prueba fehaciente de lo que ocurre en Brasil: "No pude asumir mi tercer mandato del que fui democráticamente elegido por amenazas de muerte que venía recibiendo desde 2011 y, especialmente, durante la campaña", explicó.

Nazareth no estaba en la sala ni participó de los debates anteriores sobre la temática, pero pidió la palabra durante la exposición del exiliado: "Bolsonaro no abandona Brasil, incluso después de haber sufrido un verdadero intento de acabar con su vida. No es un criminal y su gobierno no es una organización criminal. No es racista, fascista o autoritario", lanzó.

Luego de afirmar que la comunidad LGBTIQ no está siendo discriminada, volvió a a tacar a Wyllys: "Personas que abandonaron a sus electores para recorrer el mundo para diseminar fake news no tienen credenciales para hablar sobre democracia", se quejó para sentenciar que era una "vergüenza" su presencia como expositor en la ONU.

Inmediatamente se aprestó a dejar el lugar cuando fue interpelada por otro de los presentes, y después de una discusión abandonó el recinto evitando escuchar a la persona que acababa de criticar.

"Si usted quisiera un debate, oiría mi respuesta. Mi presencia amedrenta a la señora y su gobierno, que no tiene compromiso con la democracia", respondió recordando sobre todo las vinculaciones de Bolsonaro con los acusados de asesinar a la concejala lesbiana un año atrás.

Después de algunos intercambios entre agravios de parte de la funcionaria y pedidos de respeto por la democracia del invitado al foro, Wyllys dejó en claro que "ella no oyó mi discurso y vino con un discurso listo. Esto demuestra que el gobierno de Bolsonaro teme la posición que yo ocupo hoy. Llamo la atención del mundo a un gobierno de mentiras. Ella no respetó la liturgia del cargo. Sin oír mi discurso, ella intentó salir de la sala después sin oír mi respuesta ", atacó.