Con apenas diez meses, la beba cruzó el estrecho de Gibraltar sin sus padres, que quedaron demorados en tierra por forcejeos con la policía marroquí. Fue rescatada por el Salvamento Marítimo de España y llevada a la costa de Tarifa en Cádiz. "Princesa" llegó con fiebre y hambrienta por lo que tomó dos mamaderas apenas recibió la ayuda médica.

Ahora, las fuerzas de seguridad pudieron contactar a sus padres biológicos que aseguraron que no "la abandonaron" y que su verdadero nombre es Fátima.

La primera noche, Fátima se hospedó en la casa de una voluntaria de una ONG, que tiene dos hijos.  Por la mañana volvió a la sede de la Cruz Roja de Tarifa, desde donde- siguiendo el protocolo-  la Junta de Andalucía determinó "una familia de acogida temporal" para la menor.

Las organizaciones humanitarias dan por descontado que es la mamá de Fátima quien debe hacerse presente para retirarla en su hogar transitorio, cuya locación ha sido mantenida en reserva para proteger la intimidad de la bebé.