De nada sirvió el acuerdo que alcanzó el Gobierno con las empresas petroleras a principio de mes, donde se estipulaba un congelamiento de precios por 60 días en los precios de los combustibles, para evitar así un tarifazo peor del existente.

Según publicó el portal especializado, EconoJournal, el Ministerio de Hacienda decidió seguir adelante con el incremento del 6,7% en el Impuesto a los Combustibles a partir de junio.

Por lo tanto, el acuerdo quedó vetusto en vistas de que todas las naftas y el gasoil aumentarán un 1,3% (cerca de 40 centavos por litro) a partir del mes que se avecina.

Fuentes oficiales aseguraron a Clarín que el congelamiento de precios en los surtidores acordado hace unas semanas “no incluía cambios impositivos”, por lo que el aumento de tarifas ahora deberá ser reglamentado por la AFIP y es un hecho.

Estas mismas fuentes aseguraron que Nicolás Dujovne no quiso esperar a que terminara el acuerdo y decidió aplicar ahora la suba, algo que sorprendió a las petroleras.