A 8 minutos del pitazo final, Frank Rijkaard (entrenador del Barcelona por entonces) llamó joven y prometedor argentino Lionel Andrés Messi Cuccittini.

El rosarino ingresó al terreno de juego por el portugués Deco. El tiempo de juego fue poco, pero fue suficiente para que aquel chico de 17 años mostrara un poco de lo mucho que podía hacer.

"Estos diez minutos los voy a recordar toda mi vida, lo esperaba desde hacía tiempo", dijo Messi tras el partido.

Lionel se convirtió en el futbolista más joven en debutar en la Liga de España con 17 años, 3 meses y 22 días (récord que después superaría Bojan). La sensación en el club catalán, en la gente y el periodismo de que había debutado un fenómeno de época ya era real y se confirmó con el correr de los años. El resto es historia.