La final de la conferencia oeste de la NBA está que arde. Luego de que San Antonio se pusiera en ventaja 2 a 0, los partidos en Oklohoma, vuelta de Ibaka incluida, emparejaron la serie en dos. El congoleño nacionalizado español fue clave en esto al igual que el poder ofensivo de Rusell Westbrook y del jugador más valioso de la liga, Kevin Durant.

Los fantasmas empiezan a sobrebolar al AT&T Center donde los Spurs hacen de local. La historia dice que en el año 2012, el equipo de Popovich había superado en los dos primeros juegos al Thunder y luego caería sorpresivamente 4 a 2. Duncan, Parker, Ginóbili y compañía intentarán que esa hazaña no se vuelva a repetir.

Para ello es fundamental ganar esta noche cuando a partir de las 22 hs (con transmición de Space) se enfrenten el 1 y el 2 de la temporada regular. Las claves del partido estarán en que San Antonio pueda detener a dos de los mejores jugadores de la liga como lo son Rusell Wetsbrook y Kevin Durant.

Pero principalmente Popovich debe estar obsecionado en cómo sus dirigidos podrán superar la intencidad defensiva que ha adquirido el Thunder con la precensia de Serge Ibaka. "Simplemente jugamos bien con Ibaka. Con él en el equipo podemos hacer cosas que no podemos hacer con otros", dijo Scott Brooks, entrenador del equipo que esta noche será visitante.

Los Spurs necesitan de ese juego colectivo que lo ha destacado en estos últimos años y para lograrlo cada jugador, desde Duncan hasta el triplero Danny Green, deben estar a la altura y con buenos porcentajes de lanzamientos.

Se disputa el quinto punto de esta tremenda serie que depositará a uno de estos equipos en la finales de la NBA. El juego es clave. Y los Spurs lo saben.