Con la intención de complicarle las cosas a su sucesor, el exintendente de Malvinas Argentinas, Jesús Cariglino (FR), decretó antes de irse un aumento de sueldos que ponía en riesgo las cuentas del Municipio. Sobre todo resultaba escandaloso que el alcalde pasaba a tener una remuneración mayor a los 130.000 pesos.

En lugar de suspender la medida, el actual jefe comunal Leo Nardini (FpV), reglamentó la Ordenanza 1604/15, que aumenta el sueldo a los empleados, pero estableció donaciones en su salario al igual que el de toda la primera y segunda plana del Ejecutivo municipal.

De este modo, aumento del salario de la categoría más baja pasa de  $2500 a $6500.

"Esta medida sitúa a los empleados de Malvinas Argentinas al tope del ingreso salarial de la provincia de Bs.As. y termina con la precarización presente durante años", indica un comunicado de prensa del Oficialismo.

Nardini consideró que el aumento era "excesivo para los escalafones más altos, pero reivindicatorio para el personal que percibía el salario más bajo".

Es por ello que impulsó que el Concejo Deliberante apruebe el proyecto que dispone un "convenio de donación de un porcentaje del sueldo y de los gastos de representación del intendente, y sus funcionarios, en un fondo para posibles contingencias o catástrofes".

Sobre los pases a planta masivo que dispuso la gestión anterior, previo a dejar el Gobierno, Nardini resolvió evaluar caso por caso, para evitar que el Municipio le pague a personas que no cumplen sus tareas.

"El actual intendente decidió dictar un decreto que establece de forma clara y transparente el proceso de selección del personal que adquiera la estabilidad laboral a partir de la creación de una junta evaluadora, cuya función será diferenciar al verdadero trabajador de aquellos que cobran un sueldo pero no cumplen funciones reales, lo que representa un verdadero compromiso para terminar con la precarización laboral", se indica en el comunicado.