Eugenio vive cerca del cruce del arroyo Las Tunas con la vieja ruta nacional 9, en El Talar de Pacheco, partido de Tigre, y además de exigir justicia por los crímenes que enlutan su vida, asegura que si la comunidad Yecthakay, unas 60 familias qom dispersas en todo Tigre, hubiera recibido las cuatro hectáreas pedidas a Sergio Massa en el 2010, Micaela y Nancy estarían vivas.

Según un informe que publica la agencia Télam, en febrero del 2013 la nieta de Eugenio, Micaela, de apenas 14 años, apareció muerta en la casa de un conocido, temido "transa" (vendedor de droga) y proxeneta de La Paloma, el 'Pato Cenizo'.

El crimen parecía evidente, pero el individuo tenía como testigos del "suicidio" de la menor nada menos que a un puñado de policías, que incluso se encargaron de ir a informar a su madre de la terrible novedad.

El 2 de mayo, la madre de Micaela fue encontrada muerta en su cama, semidesnuda, boca abajo y con los brazos en cruz. Cuando su hija fue raptada por el 'Pato Cenizo' intentó vanamente recuperarla y denunció sistemática y públicamente al proxeneta y a los policías.

"Le grité que soltara a mi hija y él me agarró y me apuntó con un arma en la cabeza. Como no salió el tiro me pegó con la culata. Me dijo que me iba a prender fuego la casa si mi hija se alejaba de su casa. Cuando vino la policía, me llevaron detenida a mí. Pasó el tiempo y a mi hija la mataron de un tiro en la cabeza", había denunciado la mujer.

También relató el trato dentro de la comisaría y qué le dijo el subcomisario José Ríos, jefe del destacamento de Las Tunas: "India de mierda, negra de mierda, acá las órdenes las doy yo y a 'Cenizo' lo banco yo".

Ahora Eugenio reclama justicia: "Pido que los jueces sean verdaderos jueces, no cómplices. No están interesados en la vida de uno, y más nuestra raza, nuestro pueblo. Somos indios pero nosotros tenemos un reclamo también. También quiero pedir que intervenga el intendente de Tigre, que se llama Julio Zamora".

Es que hace años pidieron formalmente la cesión y el título comunitario de cuatro hectáreas ubicadas en Ricardo Rojas, otro barrio de Tigre,  pero los funcionarios del entonces intendente Sergio Massa primero los recibieron con la oferta de darles 10 hectáreas en la isla y después nunca más los atendieron.

Sentado frente a una mesa desnuda y con una libretita en la mano, el cacique qom reflexiona: "Entonces la discriminación y la muerte nuestra (es) sin dolor. Un calmante nos dan. La muerte es sin dolor, al indígena no le dan trabajo, entonces cómo van a estudiar las cosas los hijos, cómo va a vivir, si no le dan trabajo. Siempre ponen peros para todo".