El juez de Morón, Juan Pablo Salas, dictó este lunes el secreto de sumario en la causa que investiga la desaparición forzada de Luciano Arruga. Además, ordenó la exhumación del cuerpo.

Fue tras una reunión con el fiscal federal Sebastián Basso y los abogados que representan a la familia Arruga, Juan Manuel Combi y Maximiliano Medina del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS).

"La decisión es importante porque evidencia que a la Justicia no le cierra que haya sido un accidente  Además, evita filtraciones erróneas. Es un mensaje fuerte y claro que demuestra la seriedad con la que se está investigando", dijo Medina a Infojus Noticias tras la audiencia.

La última vez que fue visto con vida, Luciano estaba en un destacamento policial en Lomas del Mirador. Un testigo contó que lo vio en el piso moribundo. Su familia denunció desde un primer momento que la bonaerense lo hostigaba porque no quería robar para ellos. La sombra del encubrimiento policial no se despejó con la aparición del cuerpo.

De acuerdo a la causa que se tramitó en el Juzgado de Instrucción 16 de la Ciudad de Buenos Aires, a Luciano lo enterraron como NN el 11 de mayo de 2009 en el cementerio de Chacarita. Los restos todavía no fueron exhumados. Por lo que se cree que será la primera disposición de la Justicia.

Según la versión policial, el primer día de febrero de 2009 un auto atropelló a Luciano en la vía rápida de la General Paz, en el cruce con Emilio Castro. Fue frente a una garita de la policía. El adolescente iba de provincia hacia la Ciudad de Buenos Aires, pero atravesaba la autopista por un lugar que los peatones no usan para cruzar. De acuerdo con el expediente, el joven de 21 años que lo chocó fue el que dio el aviso a la policía cuando llamó al 911.

A las 3.21 de la mañana una ambulancia del SAME llevó a Luciano hasta el Hospital Santojanni. Lo operaron y ya fuera del quirófano, murió a las 8 de la mañana de ese día. Su madre lo fue a buscar a ese mismo hospital. En la recepción le dijeron que había entrado un chico atropellado pero que no sabían nada de su hijo. Ella siguió buscando en otros hospitales, salitas y comisarías.

La autopsia que le hicieron en el Hospital Santojanni estimó que el chico encontrado tenía entre 25 y 30 años. El informe detalla que el cuerpo del joven, entonces NN, presentaba traumatismos en la cabeza, un brazo, el torso y los tobillos, que las lesiones se habían debido al accidente de tránsito y que por ellas había fallecido.

Las pericias que se hicieron al vehículo arrojaron que en el momento del impacto el auto iba a menos de 80 kilómetros. El conductor, que vive en Monte Grande, no tenía alcohol en sangre.La causa se tramitó como homicidio culposo. La fiscal Marcela Sánchez pidió el sobreseimiento del joven y la jueza  porteña Laura Bruniard hizo lugar al pedido.