El acusado, de 25 años, trabajaba para una empresa de limpieza, está casado y tiene hijos. Quedó apresado en la noche del pasado sábado en la casa de su hermana, en la localidad bonaerense de General Pacheco, partido de Tigre, en la zona norte del conurbano.

Según establecieron los investigadores a través del relato de las víctimas y el análisis de las cámaras de seguridad, el violador cometió los abusos entre las 6 y 6.30, y las 15 y 15.30; es decir, cuando pasaba por el centro de Moreno antes de entrar a trabajar y cuando regresaba a su domicilio.

Los ocho abusos sexuales contra mujeres que llevó a cabo -uno en grado de tentiva- ocurrieron desde abril de 2019 en un radio no superior a las 10 cuadras del centro de  Moreno, donde llegaba en colectivo desde Cuartel V (donde residía) para luego hacer transbordo y continuar hasta Paso del Rey (donde trabajaba). 

Las imágenes de una cámara de seguridad muestran cómo las mujeres fueron abordadas en la calle, donde el agresor las amenazaba con un cuchillo o un arma de fuego y las obligaba a simular que era su novia, tras lo cual las violaba en la misma vía pública y les robaba su teléfono celular antes de escapar.

"En un caso, un automovilista intentó interceder pero él dijo que estaba discutiendo con su novia", señaló a una fuente de la pesquisa y añadió que la violación era consumada en lugares como "a la sombra de un árbol o en la entrada de un garaje".

Las fuentes detallaron que el acusado tenía antecedentes penales por hurto y robo agravado, y también fue denunciado por violencia de género por su esposa.

El fiscal Leandro Ventricelli indagará este lunes al detenido, quien durante la semana será sometido a ruedas de reconocimiento ante las víctimas.

Una de las víctimas, a quien el agresor la violó y le robó el celular y 100 pesos que tenía para cargar la SUBE, contó en Facebook: "Esto me pasó en Yoli y De la Vega, esquina Alcorta, a las 16 del martes 7 de enero. Iba al lugar de mi trabajo cuando me atacó, estaba sola, sin nada que pueda hacer".

La joven añadió que tras el ataque lo vieron en una parada de colectivos, pero se escapó: "Salimos a dar unas vueltas con mi tío para ver si lo volvíamos a cruzar y lo vimos muy tranquilo y sentado en la parada del 350 que va a Pilar. Cuando me vio, salió corriendo y no lo vimos más, los chicos de ahí lo conocen".

Los investigadores no descartan que el acusado haya atacado a más víctimas, por lo que esperan que con la difusión de su captura otras potenciales mujeres abusadas por el mismo hombre se acerquen a la fiscalía a denunciarlo.