Con pantalones cortos, ojotas, toalla en el cuello y jabón en mano entró Pablo Blesa a las oficinas de Edelap en la calle 5 de la Ciudad de La Plata, la empresa que administra el servicio eléctrico, cansado de reclamar por la restitución del mismo luego de varios días sin conseguir respuesta. 

Blesa es profesor universitario y se cansó de reclamar y no ser escuchado por la empresa distribuidora de energía y realizó esta ingeniosa manera de hacerse escuchar, o que por lo menos, lo vean y se de a conocer su situación. 

Infobae se comunicó con el profesor y comentó que "parece que si uno no hace ruido, nadie te escucha", ya que horas después de bañarse en Edelap, una escuadrilla de la compañí apareció en su domicilio para cambiar el transformador que originaba la falla y se le restableció el servicio.