La llama fue hallada este lunes en condiciones críticas en la zona del jirafario. A pesar del intento de los veterinarios, el animal se sofocó y murió por la ingesta de un envoltorio plástico.

Ya son quince los animales muertos por intoxicación o por ingesta de objetos arrojados por los visitantes.

Ante esta situación la Secretaría de Ambiente y Ordenamiento Territorial convocó a una reunión a los directivos del zoológico   para evaluar nuevas formas de trabajo y coordinar mayores medidas de seguridad.

El secretario de Ambiente, Humberto Mingorance comunicó que "reforzarán el control de seguridad con la incorporación de personal de la Policía de Mendoza a las rondas de vigilancias nocturnas y durante los horarios de visitas públicas".