Se trata de los PPC, Proyecto Pedagógico Complementario, cuyo objetivo era incluir a los chicos de escuelas públicas de la Ciudad de Buenos Aires, que se encontraban en situaciones de mayor vulnerabilidad.

Según explicaron desde la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), los talleres dejarían de funcionar luego de la resolución que implementa la Nueva Escuela Secundaria, que implica cambios en los planes de estudio, y que hace caer la resolución 512/04 del PPC.

A través de esa resolución se financiaba a esta iniciativa, creada hace una década, con el fin de ayudar a los colegios que trabajan con población sensible y poder así fortalecer la inclusión de los chicos.

Radios escolares, música, tutorías, emprendimientos comunitarios, gastronómicos, cine, campamentos, murga, cerámica, entre otras instancias pedagógicas, eran tratadas en estos talleres.

Según se sabe, en marzo pasado, delegados y directivos de escuelas secundarias porteñas se reunieron con los funcionarios del Ministerio de Educación de la Ciudad, quienes prometieron monitorear la continuación de estos módulos. Cosa que nunca ocurrió.

Por lo tanto, el próximo 1º de agosto estos talleres caducarán. Según Mario Franchi de UTE: "Este es un vaciamiento pedagógico de las escuelas porque le quitan autonomía y la posibilidad de sostener la escolaridad de los chicos".