Salvo por la aclaración de Pablo Duggan, tanto Débora Plager como Mariano Iúdica atacaron a la referente de los derechos humanos por sus descalificaciones sobre la ministra Patricia Bullrich y se escandalizaron.

Con vehemencia insistieron en que la ciudadanía reclama una política policial como la que quiere instalar la funcionaria: represión, persecución al enemigo interno, policías tirando por la espalda y sin dar voz de alto. De situaciones como esas está hablando la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, pero la mirada de 'Involucrados' queda demasiado corta. 

Iúdica además volvió insistir con su "si salgo con una cámara ahora, el 100 por ciento me dice que tengo razón". Parece que el cachetazo de realidad que sufrió anteriormente, cuando pidió pena de muerte en el caso Sheila y su tío le dio cátedra de educación cívica, no fue suficiente.