El ministro de Planificación Federal, Julio de Vido,  cuestionó el sábado la caricatura publicada en los diarios Clarín y La Nación que parodia al funcionario, y contiene un epígrafe que dice: "Schoklender fue la cara visible del escándalo en el que el subsecretario Fatala quedó salpicado, al igual que su jefe De Vido".
Al respecto De Vido dijo: "Siempre estos diarios pretenden vincularme a supuestos y fantasiosos hechos de corrupción que sólo existen en su imaginación". En este sentido recordó que "desde el año 2003 estos medios amarillistas han mancillado, manoseado con mentiras, mi imagen pública y luego como siempre, como pasa con este artículo, no hay una sola referencia a De Vido, no hay una sola imputación, nada que decir”.
"¿Por qué será que me atacan? ¿Qué buscan y no han conseguido en tantos años? ¿Qué los tiene “tan nerviosos´, como decía Néstor, muy nerviosos, al borde de la desesperación?", ironizó el ministro.
“No soy empleado de ustedes señores, nunca lo seré, tampoco amparo sicarios, ni representantes, ni voceros, ni dealers que arreglan con sus empleados y operan a sus espaldas con su silencio cómplice. No tengo pruebas pero no tengo dudas: ¡ya es un secreto a voces señores! ¡Conmigo no cuentes, yo laburo todos los días, construyo y gestiono lo que ustedes y sus medios nunca muestran!", concluyó,
A través de un comunicado, el titular de Planificación expresó que el diario "La Nación usa, como lo hacen otros medios, recursos gráficos agraviantes, imágenes que blasfeman otras imágenes, para instalar una visión sesgada y falaz de la realidad con el fin no disimulado de reemplazar a quienes llevan adelante este modelo de crecimiento con inclusión social, que conduce la presidenta, por dirigentes maleables y permeables a sus intereses".
Finalmente, De Vido pidió "a los señores del diario La Nación, basta de burla ofensiva y humillante hacia mi persona, si tienen alguna prueba en mi contra vayan a la justicia, eso sí empiecen por lo mínimo que le debe al país: paguen los aportes patronales de sus trabajadores y devuelvan Papel Prensa a sus legítimos dueños, está claro que a Lidia Papaleo la torturaron y a Cristina la quieren crucificar".

El ministro de Planificación Federal, Julio de Vido,  cuestionó el sábado la caricatura publicada en los diarios Clarín y La Nación que parodia al funcionario, y contiene un epígrafe que dice: "Schoklender fue la cara visible del escándalo en el que el subsecretario Fatala quedó salpicado, al igual que su jefe De Vido".

Al respecto De Vido dijo: "Siempre estos diarios pretenden vincularme a supuestos y fantasiosos hechos de corrupción que sólo existen en su imaginación". En este sentido recordó que "desde el año 2003 estos medios amarillistas han mancillado, manoseado con mentiras, mi imagen pública y luego como siempre, como pasa con este artículo, no hay una sola referencia a De Vido, no hay una sola imputación, nada que decir”.

"¿Por qué será que me atacan? ¿Qué buscan y no han conseguido en tantos años? ¿Qué los tiene “tan nerviosos´, como decía Néstor, muy nerviosos, al borde de la desesperación?", ironizó el ministro.

“No soy empleado de ustedes señores, nunca lo seré, tampoco amparo sicarios, ni representantes, ni voceros, ni dealers que arreglan con sus empleados y operan a sus espaldas con su silencio cómplice. No tengo pruebas pero no tengo dudas: ¡ya es un secreto a voces señores! ¡Conmigo no cuentes, yo laburo todos los días, construyo y gestiono lo que ustedes y sus medios nunca muestran!", concluyó.

A través de un comunicado, el titular de Planificación expresó que el diario "La Nación usa, como lo hacen otros medios, recursos gráficos agraviantes, imágenes que blasfeman otras imágenes, para instalar una visión sesgada y falaz de la realidad con el fin no disimulado de reemplazar a quienes llevan adelante este modelo de crecimiento con inclusión social, que conduce la presidenta, por dirigentes maleables y permeables a sus intereses".

Finalmente, De Vido pidió "a los señores del diario La Nación, basta de burla ofensiva y humillante hacia mi persona, si tienen alguna prueba en mi contra vayan a la justicia, eso sí empiecen por lo mínimo que le debe al país: paguen los aportes patronales de sus trabajadores y devuelvan Papel Prensa a sus legítimos dueños, está claro que a Lidia Papaleo la torturaron y a Cristina la quieren crucificar".