En la Argentina no hay ninguna consecuencia por hacer una falsa denuncia que genera costos innecesarios y distrae a la Justicia de su verdadera labor. Por eso es que desde el PRO cada vez son más las que se unen a Elisa Carrió, Graciela Ocaña y ese grupo de inventores de causas.

El juez federal Ariel Lijo resolvió archivar una causa que investigaba la construcción del mausoleo en homenaje a Néstor Kirchner en Río Gallegos.

La presidenta del PRO, Patricia Bullrich, una de las denunciantes, sufrió un revés judicial a días de las elecciones y volvió a quedar en ridículo.

De acuerdo al magistrado, “no se advierte que se haya violado la ley ni que se haya cometido ilícito alguno”. 

En su resolución, el juez federal sostuvo que “no se observaron acontecimientos que permitan elaborar una hipótesis alternativa de investigación o que posibiliten la obtención de medios probatorios que hagan posible ahondar con la presente pesquisa. Ante este panorama, y toda vez que no se ha visto corroborada la versión acusatoria formulada, deviene como resultado necesario adoptar el criterio contenido en el artículo 195 del Código de Procedimiento y, en consecuencia, proceder al archivo de los presentes autos”.

“No se advierte que se haya violado la ley ni que se haya cometido ilícito alguno”, apuntó el magistrado federal. “No se advierte que se trate de un regalo para un funcionario público”, añadió Lijo. “Los fondos utilizados para la construcción del mausoleo tuvieron como objetivo que los residentes puedan rendir homenaje”, apuntó el juez.