Cuando la cantidad de votos que separaban a Cristina de Bullrich era de tan solo 6000 y faltaban escrutar unos 300.000 sufragios en un distrito como La Matanza, donde la expresidenta tiene un amplio apoyo, se decidió de manera unilateral terminar de hacer el recuento.

Si bien es cierto que en ocasiones anteriores tambien se detuvo faltando un porcentaje mínimo, en esos casos el resultado final no podía verse alterado ya que las diferencias entre las fuerzas era mucho mayores.

Pero la gobernadora mostró la hilacha y volvió a arremeter contra el kirchnerismo responsabilizandolo de no haber aprobado el proyecto de voto electrónico.

Al parecer Vidal no tiene la información de que los paises que alguna vez instrumentaron el voto electrónico volvieron sobre sus pasos y prefirieron votar nuevamente con boletas por la falta de seguridad que el sistema electrónico conlleva.

Para mas datos también habría que tener en cuenta, a la hora de pensar en implementar el voto electrónico que, en este país, le hackearon la cuenta de twitter a la Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. ¿Qué seguridad se podría tener sobre la veracidad de los resultados de esa elección?