La mandataria consideró como el "primer intento serio de razonabilidad y regulación al sector financiero" a los nueve principios aprobados por la ONU que dan marco a un sistema legal global para los procesos de reestructuraciones de deuda soberanas.

Tras agradecer la aprobación del sistema que propuso Argentina para el tratamiento de deudas soberanas, la jefa de estado celebró la conquista como "soberanía para decidir cómo se va a reestructurar una deuda, con trato equitativo para que todos sean tratados de la misma forma".

“El 1 por ciento de la población concentra el 50 por ciento de la riqueza a nivel global. ¿Cuánto tiempo puede sostenerse un mundo con tanta inequidad?”, se preguntó y le preguntó a los diplomáticos.

La Presidenta criticó el "hostigamiento de los fondos buitres" a los que calificó de "depredadores financieros" y aseguró que cuentan con "la complicidad de cierto sector judicial" de los Estados Unidos.

Además, advirtió que los países centrales quieren "trasladar a las economías emergentes" la crisis originada en 2008 con la crisis del Lehman Brothers, a pesar de que los propios emergentes "fuimos los que hemos sostenido en crecimiento de la economía" mundial.