El diario La Voz del Interior de Córdoba publicó un video filmado en una celda del módulo MX1, de máxima seguridad, en el que señala que "se observa a cinco internos en clima festivo consumiendo cocaína, y uno de ellos sacando de la cintura y mostrando un cortaplumas de gran tamaño".

El fiscal general Alejandro Moyano fue puesto en conocimiento del material a principios de abril, quien derivó el video al fiscal Marcelo Fenol, del Fuero Provincial de Lucha contra el Narcotráfico para que investigara y tomara medidas.

Según La Voz, "entre los presos que participan de la 'fiesta' en el Pabellón B1, del MX1, fue identificado Exequiel Páez", uno de los más peligrosos del pabellón, en palabras de los penitenciarios.

La gravedad del hecho reviste en varias cuestiones. Jactarse de portar armas y tomar drogas, y del acceso a teléfonos ¡además con conexión a Internet!

El diario cita el caso del secuestro virtual del domingo 13 de abril en el barrio General Paz, en el que murió una mujer de 79 años, de un infarto al escuchar las negociaciones para liberar a un nieto, por cuyo rescate pedían 20 mil pesos.

Un guardiacárcel contó a La Voz que les prohíben “abrir la boca”, pero escuchó que el tal Páez anuncia en voz alta: “Llegó la droga, muchachos”.

Por lo visto en el video, lejos están las celdas de ser un recinto de “privacidad”, para justificar el consumo de estupefacientes. Detrás de la distribución de cocaína, marihuana y anfetaminas hay un gran negocio que mueve el dinero suficiente como para comprar voluntades.

Y concluye la nota: "La prueba del video es incontrastable. La Justicia y el Servicio Penitenciario tienen ahora la palabra".