Claramente a la amiga y vocera de Javier Milei no le gustó que Lilita Carrió lo atacara y mucho menos que lo asociara con la dictadura por lo que salió a responderle.

Pero en lugar de recordarle su pasado en épocas de la dictadura cuando Carrió fue fiscal de Estado de la provincia del Chaco, desde el 1978 a 1980, durante el régimen de Jorge Rafael Videla y luego secretaria del Tribunal Superior de justicia, desde el 1980 a 1983, nombrada por Roberto Viola con nivel de Juez de Cámara, sólo se limitó a sugerirle que si tiene que atacar a alguien lo haga con Cristina y Alberto.

Viviana pidió que pararan con la "estrategia del miedo" aunque no se entendió a qué se refería y le pidió que si no le gustaba Milei que no lo mirara y ya.