El lunes se supo la sentencia por el crimen de Lucía Pérez y causó indignación y rabia en miles de mujeres de todo el país: los jueces del TOC Nº1 de Mar del Plata absolvieron a uno de los imputados y condenaron a ocho años de prisión a los otros dos, pero no por abuso sexual ni femicidio: por venta de drogas.

Desde "Beba- feminismo en internet", 15 periodistas feministas como Laura Gotfryd, Ximena Schinca, Vanina Pikholc, Lupita Rolón, Paloma Navarro, Florencia Freijo, Florencia Gordillo, María del Mar, Alejandra Benaglia, Lucía Ríos, Noor Jimenez Abraham, Rocío Criado, Emilia Ruiz de Olano y Ayelén Cisneros en representación de todas las periodistas feministas de Argentina, le pusieron la voz y leyeron con la voz firme y llena de furia los alegatos de la defensora oficial de los acusados de haber abusado sexualmente de Lucía donde pone la responsabilidad en la menor por haber tenido una vida sexual plena y "tener carácter" por lo que sostuvo que "no fue un femicidio". 

Por lo que a dos años y un mes de la muerte de la adolescente de 16 años, el Tribunal Oral en lo Criminal N°1 de Mar del Plata dio a conocer la sentencia: Maciel resultó absuelto y Farías y Offidani fueron condenados a ocho años de prisión. Los jueces consideraron que no se pudo probar que hubo abuso sexual ni que fue un femicidio.

Los jueces se basaron en la vida privada de la menor y expusieron mensajes privados de la joven con sus amigos para justificar que tenía relaciones con personas mayores cuando ella quería. 

Cabe recordar que hay una diferencia muy grande entre tener relaciones consentidas y que abusen sexualmente contra tu voluntad, hecho que no tuvieron en cuenta los jueces, alegando que Farías, uno de los acusados, compró "facturas y una cindor" para pasar un buen rato con Lucía. 

 Además, el Tribunal argumentó que ella conocía los riesgos y sabía manejarlos. Los jueces juzgaron la intimidad y vida de la víctima. Lucía, por su personalidad y experiencia, no podía ser violada, dijeron.

Por último, la primera fiscal del caso, María Isabel Sánchez, habló de una “agresión sexual infrahumana”. Contó que los tres acusados drogaron a la chica, abusaron sexualmente de ella y la mataron por empalamiento. Después -dijo- lavaron el cuerpo para ocultar el crimen. Los dichos no se basaron en ningún informe médico.