Consciente de la importancia de las obras que el Gobierno llevó a delante en la provincia de Formosa, la presidenta Cristina Fernández dejó en claro cuál era el objetivo que perseguía, desde la firma del acuerdo de recuperación histórico firmado por Néstor en 2003: "Hoy venimos a traer vida, porque con más de mil millones de pesos venimos a traer agua y luz, que es producción, progreso e inclusión social", celebró la mandataria al comenzar su discurso.

La jefa de estado destacó las diferencias notables entre la provincia que visitaron al llegar al poder, en 2003, y la actualidad de la región: "Cuando uno entra a un bar, va a un kiosko o se sube a un taxi, no hay formoseño que no hable de Néstor Kirchner y de la recuperación histórica que vivió la provincia".

"Algunos en campaña parece que se saben todo, hasta la fórmula de la Coca Cola, y después llegan y no saben ni hacer un mate cocido", advirtió la presidenta en referencia a los candidatos que ya mostraron trabajos de campaña presidencial.

"Cómo no te va a doler cuando te vota gente que no te conoce,- en referencia a los apoyos internacionales en la ONU ante el litigio con los buitres- y otros aquí en su ceguera, creen que votan contra un gobierno y no se dan cuenta que votan en contra de los intereses de los argentinos", diferenció la jefa de estado.

En cuanto a la situación que vivió la provincia del noroeste argentino en los años que precedieron al kirchnerismo, Cristina recordó un dato revelador: "En 1952, Perón hizo la última planta potabilizadora de agua en Formosa. La otra la hicimos nosotros".

Por último, la representante del ejecutivo se comprometió "a saldar la deuda histórica con el NEA argentino, con aquellas provincias que aún no están en la red de gas".