En medio de una crisis económica y social fenomenal que el Gobierno Nacional solo atina a combatir con 64 artículos a precio fijo por seis meses –vale recordar: hasta las elecciones–, el Presidente decidió hacer lo que mejor sabe: tomarse vacaciones.

Sigilosamente, esta vez el Presidente eligió un resort de la localidad cordobesa de Alta Gracia para pasar el finde largo de Semana Santa junto a su esposa Julilana Awada y la hija de ambos, Antonia.

De acuerdo a trascendidos que recoge el diario La Voz, Macri alquiló una casa en el barrio cerrado El Potrerillo de Larreta, un country que cuenta con cancha de golf y un paisaje privilegiado, a seis kilómetros del centro de Alta Gracia, donde se quedará hasta el domingo.