Al menos 27 personas han muerto y 184 han resultado heridas este viernes en el incendio de una discoteca de Rumania, según informan los servicios de emergencias locales.

El saldo trágico de víctimas se produjo en el centro de Bucarest, la capital de Rumania, en una tragedia que tiene muchas similitudes con lo ocurrido en el boliche Cromañón el 30 de diciembre de 2004.

Mientras que las autoridades locales todavía no indicaron cuales fueron las posibles causas del siniestro, un testigo relató al canal de noticias Digi24 que las llamaradas fueron provocadas por unos fuegos artificiales en el interior del local.

"El incendio comenzó con los fuegos artificiales. Se extendió por un pilar del club y luego por todas partes", explicó el joven, uno de varios cientos que fue a ver un concierto del grupo de rock local "Goodbye Gravity".

"Solo había una salida de emergencia abierta; la otra estaba bloqueada", aseguró el testigo según declaraciones reproducidas por la agencia EFE.

En el momento del incendio, que tuvo lugar en torno a la medianoche (23.00 hora peninsular española) en el centrico club Club Colectiv de la capital rumana, había unas 500 personas en el interior de la discoteca.

Según los primeros indicios, el local habría incumplido las normas de seguridad. "Ya tenemos indicios de que no se han respetado los reglamentos legales", ha afirmado el presidente de Rumanía, Klaus Iohannis, que precisa que la tragedia se produjo por "ignorar las normas y la ley".

"Espero que las autoridades terminen rápidamente las investigaciones y tengamos las conclusiones para poder explicar a los padres, hermanos e hijos de las víctimas por qué ha sucedido esto", ha agregado el jefe de Estado.