Ante la desesperación por haber perdido su celular en un lago, un joven alemán de 16 años estaba dispuesto a cualquier cosa con tal de recuperarlo.

El hecho ocurrió en un club de pesca privado, ubicado en Meppen, Alemania, donde este chico abandonó su iPhone, que desafortunadamente para él, cayó al agua.

Primero, el joven, intentó convencer al dueño del parque de contratar buzos de rescate, para que se sumerjan en las aguas del lugar, y así recuperar su preciado celular.

Ante la negativa, lógica, del dueño, no tuvo mejor idea que intentar un heroico y fantástico plan: volvió al lugar del siniestro con dos bombas eléctricas y dos mangueras, para drenar el lago.

Según el New York Daily News, el adolescente trató de dirigir el agua desde el lago, que mide 80 metros de largo, 15 de ancho y casi dos de profundidad, hasta el baño del club, pero finalmente inundó un estacionamiento.

"Pensé que con las dos bombas se drenaría suficiente agua del lago, y así podría encontrar mi celular", confesó el joven al medio Metro, y agregó: "Yo sabía que el teléfono estaría muerto, pero quería encontrar la tarjeta de memoria para recuperar mis números, fotos y videos".

El final de la historia estuvo lejos de ser feliz. El chico, no solo no recuperó su iPhone, sino que la madre deberá abonar al dueño del lugar, importantes sumas de dinero por daños y perjuicios, y por la limpieza del lugar, que quedó hecho un desastre tras la inundación.