El hecho ocurrió en Hong Kong, donde un camión blindado que transportaba 67 millones de dólares se abrió accidentalmente, soltando una remesa de 2 millones, que cayeron sobre una autopista.

El camión de la empresa de seguridad británica G4S transportaba 525 millones de dólares de Hong Kong (unos 67 millones de la moneda estadounidense), cuando una de las cajas que contenía el dinero se cayó del vehículo, debido a una falla en la puerta trasera.

Así, unos 2 millones de dólares norteamericanos literalmente llovieron sobre la calle Gloucester, gracias a lo cual 67 personas –según estableció la policía local luego de observar las filmaciones– se hicieron con unos cuantos billetes, sin que se produjeran detenciones.

La escena fue grabado por varios hongkoneses que pasaban por el lugar, y se ve en las grabaciones cómo decenas de peatones y conductores recogen los billetes desparramados en el asfalto, cual insólito regalo de Papá Noel.