Una joven británica de 22 años, que estaba desaparecida desde hacía 2 meses, fue rescatada en un control policial en la localidad remota del Estado de Queensland, en el noreste de Australia.

La mochilera estaba manejando por la ruta y los policías la detuvieron. Ahí notaron que tenía el rostro golpeado y un estado visiblemente deteriorado. Además parecía nerviosa hasta que los uniformados descubrieron que había un hombre escondido en la parte trasera que iba amenazando a la conductora. 

La mujer "fue detenida durante semanas contra su voluntad y fue víctima de agresiones graves", según explicó la policía. Antes de desaparecer y perder contacto con todos sus familiares, la turista británica había conocido a este local de la misma edad que terminó abusando sexualmente de ella y la retuvo contra su voluntad. 

El hombre quedó detenido tras ser instruido de varios cargos, entre ellos violación, agresiones, estrangulamiento y privación de libertad.