Un enfermero francés contó que, sin saberlo, ayudó a uno de los yihadistas durante los ataques terroristas en París. De nombre David, el hombre intentó salvar la vida de Brahim Abdeslam, que activó su cinturón explosivo frente al café Comptoir Voltaire de la capital francesa.

El enfermero, que estaba presente en el café Comptoir Voltaire de París al momento de los ataques perpetrados por yihadistas del Estado Islámico, intentó ayudar a un hombre que estaba en el suelo, pero se encontró con cables y pólvora en su torso.

El enfermero de 46 años, quien se identificó sólo como David, explicó que trabaja en un hospital de París y que entró en acción al ver a los demás clientes en heridos en el piso del café, informó el sitio inglés Daily Mail.


En un video grabado por una de las víctimas se puede observar al enfermero en plena maniobra de resucitación sobre el cuerpo de Abdeslam. "Había una llama enorme y mucho polvo. Inmediatamente pensé que era de las calefacciones", reveló el hombre.


Sin embargo, lo que descubrió debajo de la ropa de Abdeslam fue mucho peor que una lesión: "Había cables, uno blanco, otro negro, otro rojo y otro naranja. Eran cuatro colores. Me di cuenta de que era una bomba", explicó a Reuters.

David confirmó que no vio entrar al terrorista al café, por lo que cree que estaba sentado en una mesa antes del ataque. La bomba que Abdeslam tenía adherida a su torso no explotó por completo, por lo que el enfermero pudo constatar que tenía "una hendidura de 30 centímetros" en su costado.


"Pensándolo bien después, la maniobra de resucitación es muy enérgica, yo también podría haber explotado", agregó.