Recientemente The Washington Post publicó un artículo en el que señala que Donald Trump compartió datos secretos con el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergéi Lavrov, y el embajador Sergéi Kislyak, el presidente republicano salió a defenderse y señalar su  "absoluto derecho" a compartir con Rusia "hechos" sobre terrorismo .

Inmediatamente se desató una crisis interna sobre la conexión rusa con el magnate y su familia. Ahora, Vladimir Putin declaró que  "en Estados Unidos se desarrolla una esquizofrenia política" ante las acusaciones a su par. 

"Ya he hablado con Lavrov, habría que regañarlo por no compartir estos 'secretos' con nosotros", bromeó Putin delante de los periodistas y trató de bajar el tono de la polémica con el Kremlin. 

También agregó que Moscú está dispuesto a difundir la transcripción del encuentro entre Trump y Lavrov en caso de que "el Gobierno de Estados Unidos lo considere posible".

"Inicialmente, cuando estábamos observando cómo se desarrollaba este proceso de la lucha política interna, nos pareció ridículo. Ahora no simplemente da pena, es motivo de preocupación para nosotros, porque es difícil de imaginar qué más pueden inventar las personas que generan tales tonterías y disparates", apuntó Putin.

También criticó la propaganda antirrusa ya que "O no entienden que hacen daño a su propio país, y en ese caso son simplemente brutos, o lo entienden todo, y en ese caso son gente peligrosa y sucia"