Si en algo se caracteriza Francisco es en su actitud mucho más relajada ante las burocracias y códigos de conducta conservadores que tiene que tener Su Santidad.

Este jueves, el Sumo Pontífice compartió el almuerzo con los trabajadores del Vaticano. Incluso tomó una bandeja y se sirvió él sólo, sin ayuda de nadie.

Así lo dio a conocer una periodista argentina del diario La Nación que se encontraba en el lugar, y que se mostró impresionada por la actitud del Papa.