Este martes saldrá a la luz un libro - Entrevista sobre el Pontífice - en el cual habla sobre su juventud, sobre los corruptos y los homosexuales.

En relación a este último tema, Bergoglio afirma que no deben ser rechazados ni marginados y recordó sus palabras en el vuelo de vuelta a Roma desde Brasil donde dijo: "si una persona gay, busca al señor y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarle?". Luego, continúa: "entonces parafraseé el Catecismo donde explica que estas personas deben ser tratadas con delicadeza y no marginadas".

También remarca que le gusta nombrarlas "personas homosexuales" porque primero está la persona, con su dignidad.

"La persona no es solo definida por su tendencia sexual:No olvidemos que somos todos criaturas amadas por Dios, destinatarias de su infinito amor", remarca.

En buena hora vienen estas palabras del Papa Francisco para seguir generando conciencia y libertades, para dejar atrás la discriminación a las personas por su condición sexual, sea la que se haya elegido.