En el texto, que pretende saltar el cerco mediático de mentiras y desinformaciones orquestadas por las corporaciones de la información, es el mismo que fue publicado el jueves pasado en medios locales, asegura que la denuncia contra la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y el canciller Héctor Timerman, entre otros, buscaba "un efecto político desestabilizador".

Según sostiene el Gobierno, tras el fallo de Rafecas "sólo es posible ratificar el camino trazado por el Poder Ejecutivo y el Congreso Nacional a través del memorándum de entendimiento" con Irán y advirtió que dicho acuerdo es la única "herramienta que permitiría interrogar a los ciudadanos iraníes acusados, y a partir de allí, llevar el caso hacia un juicio oral y público".

Asegura además que en su fallo, Rafecas "rechazó categóricamente el escrito presentado por el fiscal y ratificó lo que muchos especialistas de renombre sostuvieron luego de leer la denuncia con detenimiento" y recordó que "la evidencia reunida lejos de sostener mínimamente la versión del fiscal, la desmiente de modo rotundo y lapidario".

También resaltó que el juez "presenta documentos hasta ahora desconocidos", dos escritos "judiciales idénticos -firmados por el fallecido fiscal Nisman y fechados en los meses de diciembre de 2014 y enero de 2015- nunca presentados". En los escritos se realizan "consideraciones sumamente positivas a la política de Estado del gobierno nacional desde 2004 hasta la actualidad", indicó.