Es una tradición que comienza en la escuela primaria y nos acompaña en los asados, marchas políticas, reuniones con amigos, partidos de fútbol, y todo tipo de evento en la que pueda usarse.

El doble sentido sigue teniendo su vigencia y no pierde su impacto, por lo que nunca se va del todo de nuestras vidas. Pachu es un experto en el tema y ha hecho del chiste que habla de una cosa pero se refiere a otra, una escuela, que remata con una cara de inocencia o picardía -según qué amerite el remate-, única.

Esta vez contó con Carina Zampini, quien como actriz consumada, juga al despiste para dejársela servida al ex Showmatch para que pueda lucirse.