Este martes, el juez Thomas Griesa recibió a los abogados de Argentina, de los fondos buitres y los bancos, en una nueva audiencia del litigio que mantiene el país con los holdouts.

Griesa rechazó reponer el stay y señaló que sería "muy desafortunado" en caso de concretarse un default en nuestro país. Además, el juez pidió que  los representantes de los fondos buitre y de Argentina deberán juntarse "continuamente" con Daniel Pollack hasta que se alcance una solución. En sintonía con esa linea, el mediador citó a una nueva audiencia para mañana a las 11.

El encuentro, en la Corte Distrital de Nueva York, respondió a pedidos de los bancos que operan como agentes de pagos a los bonistas que ingresaron al canje, ya que las entidades le reclamaron al juez aclaraciones sobre qué deben hacer con el dinero que Argentina depositó en sus cuentas cuando operó el vencimiento del 30 de junio, pero que el magistrado ordenó embargar.

En la audiencia participaron el Bank of New York Mellon (BoNY) y el JP Morgan, y además fueron convocados representantes de la Caja de Valores de Bélgica, de Euroclear, de la agencia Cleartream Banking y de bonistas europeos que integran la agrupación Euro Bondholders.

La decisión de Griesa implicó que las entidades financieras tengan bloqueado el pago a los bonistas que entraron a los canjes de 2005 y 2010 de la deuda defaulteada de la Argentina.

Por otra parte, también se trató la "moción de reconsideración parcial" introducida por el principal litigante contra la Argentina, el fondo NML Capital, que sostiene que la Argentina "se niega a tratar de llegar a una solución".