En la final del torneo regional de Porto Alegre, que Gremio ganó en los penales tras igualar 0-0, la tensión vino por parte del duelo entre Kannemann y Paolo Guerrero.

Apenas a los tres minutos de iniciado el partido, el defensor argentino fue fuerte arriba y le pegó un codazo en el rostro. El peruano se puso de pie, lo insultó y se ganaron la amarilla.

La pegajosa marca del ex San Lorenzo no le gustó nada al delantero del Inter. Tan molestó y enfadado quedó, que al término del partido encaró a los micrófonos para descargarse duramente contra el 'Perro'.