Este enfrentamiento protagonizado por jugadores de rugby británicos y franceses, ocurrió cuando se enfrentaban las dos selecciones, que representaban a la marina de sus respectivos países.

El partido se disputó en Toulon, una ciudad francesa, ubicada al sur-este del territorio galo. Luego de la batalla campal, un jugador de cada equipo fue expulsado del compromiso, el cual finalizó 28-3 a favor de los franceses.