El exjugador emblema de Racing llegó a Bolivia con la ilusión de cambiarle la cara al fútbol de ese país y hacerlo más competitivo en las próximas eliminatorias sudamericanas.

El entrenador argentino buscó insuflar confianza pero sin generar falsas expectativas: "Acá lo que les puedo decir, porque no soy de las personas que les va a decir que vamos al Mundial, pero les puedo decir que vamos a hacer todo lo posible, y estamos ilusionados para lograrlo...Este desafío es el más importante de mi carrera. No hay que tener miedo, hay que tener los pies sobre la tierra, y pensar que con trabajo se va a poder hacer".

Para arrancar comenzó con el pie derecho al recibir el mensaje de apoyo del expresidente Evo Morales quien lo trató de ''hermano'' y al mismo tiempo le pidió la clasificación a la próxima Copa del Mundo.

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