Son días agitados en el Frente Renovador. El pedido de Sergio Massa de acotar la lista de precandidatos a Gobernador generó nerviosismo en la tropa.

La que reaccionó con todo fue Mónica López. La blonda precandidata no le gustó nada que Felipe Solá haya dicho que no había lugar para terceros y estalló. El ex Gobernador se refería a que los únicos que están en la competencia son Darío Giustozzi y Francisco de Narváez.

"Si me bajo, lo hago porque yo considero que tiene que ser así, no porque el pelotudo éste me lo diga", tiró sin filtro la diputada provincial massista.

No fue el único accionar llamativo de la dirigente oriunda de Avelaneda.

En estos días realizó junto a su marido, el sindicalista Alberto Roberti, una producción fotográfica para la revista Caras. En la misma, con un estilo muy noventa, se puede ver a la precandidata posar con orgullo junto a sus más de 240 pares de zapatos.

También se fotografiaron delante de su opulento hogar. Donde se puede apreciar el nivel de vida que lleva la pareja del Frente Renovador.

"Voy al súper, a la verdulería, cocino y me gusta divertirme. Me gusta el 'Bailando', el chusmerío y el conflicto que se genera. Si yo soy como todos" dijo. Aunque luego mostró su vasto vestidor que consta de "tres calles" a las que bautizó Juan Domingo Perón, Eva Perón y Roberti y admitió que tiene 240 pares de zapatos.

Mónica López, además, podría ir al Bailando de Tinelli. A fuerza de declaraciones polémicas y una frondosa billetera para la campaña, la blonda se hizo un lugar en el Frente Renovador. Habrá que ver si le alcanza para comptir con la del "Colorado", su exaliado político, devenido en enemigo acérrimo.