La ministra del Seguridad Interior Amber Rudd cargó contra la encriptación de los mensajes por parte de Whatsapp, al considerar que así “está ayudando” a terroristas y pedófilos a escala nacional y mundial.

Teniendo en cuenta que en el Reino Unido es habitual y casi general el espionaje oficial a la vida cotidiana de sus ciudadanos, no puede resultar extraño que la funcionaria critique a este tipo de tecnología que apunta a resguardar las comunicaciones privadas.

"No necesito saber cómo funciona la encriptación para entender cómo ayuda a los criminales”, sostuvo la funcionaria, al tiempo que adelantó que los servicios de inteligencia ingleses ya están trabajando para vulnerar esa medida de seguridad.

“Estamos trabajando con los servicios de seguridad para encontrar la mejor forma de combatirlo", señaló Rudd por la BBC, haciendo extensiva su crítica a herramientas y redes sociales como Google y Facebook, que también –se supone– brindan seguridad a sus contenidos.