El humorista Cacho Garay pagó un millòn de pesos y quedó en libertad, después de haber sido detenido por una denuncia por amenazas por la que hasta hoy sigue siendo su pareja.

La denunciante y esposa del humorista aseguró que la obligaba a participar en fiestas sexuales de las cuales a veces participaba y otras actuaba de simple observador.

Cuando la policía fua a buscarlo a su domicilio se encontró con una gran cantidad de armas entre ellas un machete que pasó a ser importante porque Verónica Macías Bracamonte, esposa del humorista, aseguró que en varias ocasiones la había amenazado con él.