El intendente de la localidad misionera de Alba Posse, Nelson Carvalho, decidió poner en marcha una insólita medida, que no figura en decretes, ordenanzas o comunicaciones institucionales, a partir de la cual, instaura un toque de queda para menores.

El jefe comunal decidió que los chicos que tengan menos de 15 años no podrán transitar por la calla a partir de las 22 horas, y esta determinación ocasionó la polémica en la pequeña localidad misionera que se encuentra a orillas del río Uruguay.

“Encontramos la manera de que, después de las 10 de la noche, entiendan que tienen que volver a sus casas”, explicó el intendente en diálogo telefónico con Mauro Viale, y amplió: “Si encontramos un chico de 14 años, la policía trata de corroborar en qué anda el chico o hacia dónde va; si no encontramos justificativo, lo acompañamos hasta su casa o lo llevamos a la comisaría y se les comunica a los padres que vengan a buscar a su hijo”.

Mauro le preguntó si la ley de menores le autorizaba a llevar a cabo esta medida, y el jefe comunal, luego de vacilar en su respuesta, expuso argumentos poco claros.

“Un chico de 14 o 15 años, circulando por la noche, aprendió a tocar la cosa ajena, estaba consumiendo droga, estaba alcoholizado”, explicó Carvalho.