El 2018 llegó cargado de aumentos y un golpe tremendo al bolsillo, además de que la inflación no deja de subir, también se anunció el aumento del transporte público, un transporte que cada vez está más degradado en su servicio. 

Ya hubo aumento en el transporte entre el 56% y 38% (trenes y colectivos) y aún resta el último ajuste en junio y lo peor de todo es que el Gobierno no amplió el saldo negativo disponible en la tarjeta SUBE,que se encuentra fijado en $20 desde hace dos años. 

La Nación le consultó al Ministerio de Transporte y afirmó que, pese a la suba del transporte, no está en los planes aumentar el valor. "No se incrementó y por ahora no está en agenda", indicaron.

Con los valores actuales del transporte en el área metropolitana, el monto negativo en la tarjeta alcanza para dos viajes en colectivo en su mayor extensión (dos pasajes de $9,50). En mayo de 2016, la última vez que se elevó el monto, eran tres los viajes que podía hacer un pasajero sin tener que recargar su tarjeta (tres boletos de $6,50).

En tren, la SUBE cubre tres boletos de recorrido más corto en las líneas Mitre, Sarmiento o San Martín (tres de $6,25 suman $18,75) y únicamente dos para la extensión media ($15, que representan dos boletos de $7,50). Hace dos años, con el boleto mínimo en estas líneas en $4, se podían hacer cinco viajes mínimos.

Si bien los usuarios sumaron en 2018 la posibilidad de pagar menos por viajes sucesivos en un lapso de dos horas -con el sistema intermodal de la RedSUBE se bonifica el 50% del segundo boleto y el 75% de los tres siguientes-, el escenario se profundizará a partir de junio. En ese mes, se aplicará el último tramo de los aumentos del transporte, que llevarán el boleto mínimo de colectivo a $10 (11% de suba) y el del tren en estas líneas a $6,75 (8%).

El saldo negativo en la SUBE estaba en $20 desde junio de 2016. 

Fuente: La Nación